Se prevé que las protestas acompañen la gira internacional del presidente de los Estados Unidos Barack Obama, gira que incluirá la Cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago, y una visita oficial a la Ciudad de México los días 16 y 17 de abril.
Ciudad de México. 1 de abril. Londres fue hoy el escenario de multitudinarias protestas contra el sistema capitalista y el cambio climático, en un espacio simbólico singular para la historia del desarrollo industrial y financiero del planeta. Las protestas fueron convocadas por diversos grupos anarquistas y ambientalistas, de matriz anticapitalista, como respuesta a la reunión del Grupo de los 20 (G-20), en la que los gobiernos más poderosos del mundo buscan alternativas para enfrentar la crisis económica global.
El mundo que todo lo ve. Los medios locales trasmitieron minuto a minuto a través de twitter. Centenares de fotógrafos y camarógrafos acompañaron los manifestantes. CNN trasmitió en vivo por Internet los acontecimientos a través de dos canales, uno en las calles y otro desde un helicóptero. En una larga jornada, los fotógrafos y los camarógrafos estuvieron a la caza de los hechos aislados de violencia.
Las líneas del orden y el caos. Son al menos cuatro campos o coaliciones ambientalistas, anarquistas, contra la guerra y estudiantes, quienes participaron hoy en las protestas. Entre estas se destacaron las coaliciones G-20 Meltdown y Climate Camp. Se trata de grupos que en un plano con los ejes del de orden y caos, sistema y disidencia se ubican en el área de los más radicalizados, como lo muestra un multimedia publicado en The Guardian. Otras coaliciones, como Put People First, las organizaciones humanitarias y las centrales obreras se mantuvieron expectantes pero fuera de las movilizaciones por temor a la violencia.
Primero la gente: trabajo, justicia, medio ambiente. Las manifestaciones comenzaron el sábado 28 de marzo, con una marcha de 35 mil personas con el lema “primero la gente”, que abogaba por trabajos, justicia social y acción contra el cambio climático. Esta fue convocada por el sector más moderado del movimiento que no comparte necesariamente las posturas contra el sistema de los grupos anticapitalistas.
Cambio climático y revolución industrial. Para los grupos anticapitalistas y ambientalistas, la Revolución Industrial y el Cambio Climático está simbolizadas como dos partes del mismo proceso a través de la extracción del carbón, que en Inglaterra fue la fuente combustible fósil con la que despegó el capitalismo industrial en el mundo del siglo XVII. Esto a su vez se vincula con el cambio climático y la persistencia de los combustibles fósiles —el petróleo— como motor del capital, y del sistema financiero como el medio para especular con el trabajo humano y la vida en la tierra.
Cambio climático y revolución industrial. Para los grupos anticapitalistas y ambientalistas, la Revolución Industrial y el Cambio Climático está simbolizadas como dos partes del mismo proceso a través de la extracción del carbón, que en Inglaterra fue la fuente combustible fósil con la que despegó el capitalismo industrial en el mundo del siglo XVII. Esto a su vez se vincula con el cambio climático y la persistencia de los combustibles fósiles —el petróleo— como motor del capital, y del sistema financiero como el medio para especular con el trabajo humano y la vida en la tierra.
¿Podemos imaginar un mundo sin capitalismo?: Yes We Can. Según los activistas anticapitalistas: “el capitalismo ha estado calentando nuestro planeta, derritiendo las capas de hielo, incendiando los bosques y presionando al planeta al extremo. Ahora nosotros vamos a poner calor sobre los capitalistas.” En su plataforma atacan problemas que vienen siendo discutidos por la opinión pública en Inglaterra, Europa y Estados Unidos: bonos para los ejecutivos financieros, descuentos tributarios para los más ricos, mercados financieros no regulados, inversión pública para rescatar compañías han estado abusando de la confianza pública. G-20 Meltdown (Deshielo-G-20) convocó hoy a una fiesta masiva en el distrito financiero de la City, que concluyó al medio día frente el Banco de Londres. Allí llegaron cuatro comparsas: Caballo Rojo Contra la Guerra, Caballo Verde contra el caos climático, Caballo Plateado contra los crímenes financieros, y Caballo negro contra la explotación de carbón. 4.000 personas, con diversos carteles y consignas. Unos pedían castigo a los criminales de guerra, otros desterrar a los banqueros, unos más decían “El capitalismo no está funcionando”. Junto al Banco de Londres un muñeco bien vestido lucía un letrero provocativo: “Come al banquero”.
Un mundo sustentable en pequeño. Climate Camp invitó a crear un campamento en las inmediaciones de centro de negocios donde comercian los principales productores de combustibles fósiles de Europa (el European Climate Exchange). El movimiento exigió políticas efectivas para la reducción de emisiones de carbón que amenazan el equilibrio ecológico del planeta. También se manifestó contra los comerciantes que están especulando con el clima y el futuro de la vida en la tierra. En su invitación pedía a cada quien que trajera su carpa, una bolsa de dormir, una turbina eólica, un proyector de cine móvil e ideas para la acción. El campamento se montó con cierto retraso, en la tarde del martes, en plena calle. Hacia el final de la tarde estaban ya trabajando tres talleres temáticos: soluciones tecnológicas, el medio ambiente en la resistencia africana y transición a una economía de cero emisiones carbónicas. A pesar de unos encuentros amistosos con la policía, pronto se denunció una guerra química porque los carros policiales mantenían sus motores encendidos. Luego se estableció un cerco contra los manifestantes, que resistieron el embate policivo cantando una tonada de los Beatles. Horas después la policía desalojó el campo climático. Se desconocen los detalles.
Ejecutivos en Jeans. Hace un mes los ejecutivos de las grandes empresas de Estados Unidos tuvieron una semana de pesadilla cuando grupos de espontáneos, indignados por los pagos de bonos extraordinarios en las empresas recatadas con dinero público, realizaron asonadas en las inmediaciones de sus mansiones o condominios habitacionales. La semana pasada, un Profesor universitario fue despedido en Londres por llamar a la revolución e incitar la punición directa de los ejecutivos bancarios. En Internet, los gestos simbólicos contra los ejecutivos han proliferado, así como los llamados a la acción directa. Por esta razón la policía y los directivos empresariales hicieron un llamado a sus trabajadores a dejar por unos días los trajes elegantes y vestir de manera casual. La mayoría acataron el llamado, otros se resistieron a la imposición del vestido.
Tecnologías de Control. La tecnología digital ha sido una protagonista clave de esta primera jornada de protestas en Londres contra el G-20. Es técnica para el control pero también para la desobediencia. Desde hace unos años y ante la amenaza de ataques terroristas, los ciudadanos ingleses han visto restringidas sus libertades individuales. Se implementó una identificación oficial para todos los ciudadanos —la cédula de ciudadanía que los colombianos consideramos “natural”, allí no existía— y se instaló una nueva red de cámaras de seguridad en las zonas estratégicas de la ciudad. En el contexto del G.20, que reúne los jefes de Estado de los veinte países más ricos y poderos del planeta, se han activado al máximo los dispositivos de seguridad y monitoreo electrónico de la población. Así, las autoridades pueden seguir las actividades de los manifestantes y establecer las identidades de quienes cometen actos de vandalismo.
Tecnologías de Resistencia. Los grupos radicales por su posición contra el sistema saben muy bien de las consecuencias de este tipo de monitoreo para la acción pública, en la medida que es difícil escapara a la mirada del ojo multimedia de las autoridades. Por eso, la organización de las manifestaciones se ha hacho a la luz pública a través de medios tecnológicos. Los planes son publicados en Internet, a la vista de la policía. Para la comunicación entre los manifestantes y la coordinación de la acción, han empleado los mensajes de texto y también twitter, que es una red social de trabajo y publicación en línea, cuyo servicio permite a los usuarios enviar y recibir mensajes actualizados conocidos como tweets. Al parecer, incluso los grupos más radicales han organizado talleres e intercambian ideas sobre qué hacer en caso de enfrentamiento con la policía antimotines. Por ejemplo, un grupo de activistas presentó una técnica de resistencia con almohadas para enfrentar los piquetes antidisturbios.
Violencia y ataques contra los bancos. Sin embargo, en el curso de la jornada se han producido enfrentamientos, en medio de cerco policial conducido con la técnica antimotines conocida como “la tetera”, que consiste en sofocar y estrechar el cerco con grupos considerados violentos. En el curso del día y al caer de la noche, grupos de manifestantes se dispersaron por el centro de la ciudad. A esta hora se registran enfrentamientos en diversos puntos de la ciudad. La policía ha reportado 60 detenidos y decenas de heridos entre manifestantes y policías. Un manifestante colapsó en medio del cerco policial y murió caminó al hospital. Con gritos y pancartas que llamaban a abolir el dinero, saquear los bancos y castigar a los ejecutivos financieros, grupos de anarquistas atacaron la sede del Banco Real de Escocia. En el cruce de gritos con los manifestantes partidarios de una demostración pacífica, se escucho a un hombre decir: “Esto no es violencia. Nosotros pagamos por este edificio”.
Tecnologías de Control. La tecnología digital ha sido una protagonista clave de esta primera jornada de protestas en Londres contra el G-20. Es técnica para el control pero también para la desobediencia. Desde hace unos años y ante la amenaza de ataques terroristas, los ciudadanos ingleses han visto restringidas sus libertades individuales. Se implementó una identificación oficial para todos los ciudadanos —la cédula de ciudadanía que los colombianos consideramos “natural”, allí no existía— y se instaló una nueva red de cámaras de seguridad en las zonas estratégicas de la ciudad. En el contexto del G.20, que reúne los jefes de Estado de los veinte países más ricos y poderos del planeta, se han activado al máximo los dispositivos de seguridad y monitoreo electrónico de la población. Así, las autoridades pueden seguir las actividades de los manifestantes y establecer las identidades de quienes cometen actos de vandalismo.
Tecnologías de Resistencia. Los grupos radicales por su posición contra el sistema saben muy bien de las consecuencias de este tipo de monitoreo para la acción pública, en la medida que es difícil escapara a la mirada del ojo multimedia de las autoridades. Por eso, la organización de las manifestaciones se ha hacho a la luz pública a través de medios tecnológicos. Los planes son publicados en Internet, a la vista de la policía. Para la comunicación entre los manifestantes y la coordinación de la acción, han empleado los mensajes de texto y también twitter, que es una red social de trabajo y publicación en línea, cuyo servicio permite a los usuarios enviar y recibir mensajes actualizados conocidos como tweets. Al parecer, incluso los grupos más radicales han organizado talleres e intercambian ideas sobre qué hacer en caso de enfrentamiento con la policía antimotines. Por ejemplo, un grupo de activistas presentó una técnica de resistencia con almohadas para enfrentar los piquetes antidisturbios.
Violencia y ataques contra los bancos. Sin embargo, en el curso de la jornada se han producido enfrentamientos, en medio de cerco policial conducido con la técnica antimotines conocida como “la tetera”, que consiste en sofocar y estrechar el cerco con grupos considerados violentos. En el curso del día y al caer de la noche, grupos de manifestantes se dispersaron por el centro de la ciudad. A esta hora se registran enfrentamientos en diversos puntos de la ciudad. La policía ha reportado 60 detenidos y decenas de heridos entre manifestantes y policías. Un manifestante colapsó en medio del cerco policial y murió caminó al hospital. Con gritos y pancartas que llamaban a abolir el dinero, saquear los bancos y castigar a los ejecutivos financieros, grupos de anarquistas atacaron la sede del Banco Real de Escocia. En el cruce de gritos con los manifestantes partidarios de una demostración pacífica, se escucho a un hombre decir: “Esto no es violencia. Nosotros pagamos por este edificio”.
